Proceso a Elisa, la última obra escrita por Alcibiades González del Valle, estrenó la semana pasada en el Arlequín Teatro bajo la dirección de José Luis Ardissone, protagonizada por figuras de las tablas tales como Margarita Irún, Alicia Guerra y Patricia Reyna.
La mujer mas polémica en la historia del Paraguay siempre será Elisa Alicia Lynch, la Madama, la mujer del Mariscal López, ambos, figuras de claros y oscuros que representan para muchos el gran avance, como para otros la caída en picada de nuestro país, dependiendo de que lado de la historias desees estar, Lopista o Anti Lopista, e ahí de donde nace el argumento de esta pieza algo histórica y surreal que presenta González del Valle, a partir de un juicio ficticio ordenado por el presidente y llevado a cabo por mujeres de la época a la vuelta de la Madame Lynch a Asunción tras el apaciguamiento de la guerra. De este juicio, participarán dos mujeres de la actualidad que saltan del público como buscando representar la mirada de la platea; la obra prosigue con la exposición de diferentes cartas, mas que nada narraciones de diferentes hechos conocidos y no tanto, que deben ser sostenidos directamente por las intérpretes en el escenario.
José Luis Ardissone toma este libreto de González del Valle sin pensarlo dos veces, según contó él mismo al finalizar la primera función, y nos presenta un interesante viaje con grandes decisiones en cuanto a las actrices, en una escenografía convencional pero efectiva y que tiene lindas sorpresas como la representación de las mujeres que van a favor (Las Kygua Verá) y las que van en contra de Madame, introduciéndote a la historia a través de un material audiovisual, rescatado de una antigua serie sobre algunas anécdotas del Paraguay donde hace su participación en el papel de Lynch la «Heredera», Ana Brun que en ese tiempo era conocida como Patricia Abente.
La presencia de enormes figuras de las tablas asuncenas, desde ya ha valido funciones agotadas, de hecho la obra iniciaba con el teatro a reventar de sillas ocupadas, y estas actrices te presentan lo que fuiste a ver, el gran dominio del texto es lo estelar en la obra, donde las actuaciones se basan directamente en narraciones, en lo vocal, el uso de la voz, los matices e intenciones que hacen que esta obra mantengan su ritmo.
Margarita Irún, tras Las Herederas, vuelve a su elemento, el escenario con su indudable presencia escénica donde se vale de su voz y su dicción para brindar, impetu, energia y rabia a su personaje quien va por la condena a la Lynch. Alicia Guerra, la defensora que leyendo las cartas de Lynch por momentos renuncia a ese personaje para ponerse en los zapatos de la mujer a la que defiende, cambiando la intensidad de su actuación, con una interpretación más concentrada en la respiración, lo vidrioso de sus ojos que reflejan el sentimiento de una mujer que no considera justa su culpabilidad tras vivir tan grandes martirios, agregando ademas el acento extranjero que la caracteriza. Patricia Reyna presenta su tercer personaje del año, tras Residentas, obra que sigue con funciones, y la Casa de Bernarda Alba, donde celebraba sus años en las tablas, en este caso logra alejarse de los dos últimos personajes, interpretando a la mujer que preside el tribunal, y tan solo con su miradas y expresiones a través de los lentes o sus movimientos logra envejecer varios años.
Alejandra Ardissone, entra a escena de sorpresa y su actuación se va subiendo de tono con el atenuar de las luces, emanando pura tristeza al convertirse en un momento Pancha Garmendia. Roxana Lezcano hace presencia como Isidora Dìaz, dama de compañía y amiga de Lynch que se presenta pocos minutos en el escenario pero con una fuerza y dureza en sus convicciones sobre la decisión que debe tomar el tribunal. Antonella Zaldívar, Julieta Portillo, y Jazmín Mello, completan este elenco de mujeres en este juicio que va avanzando con gran notoriedad y presiones del exterior que se van reflejando en las diferentes reacciones y emociones que van apareciendo en la sala.
La obra es un muy interesante recorrido a la narración de estas figuras tan esenciales de la historia del Paraguay, de una forma bastante imparcial sobre cada hecho y hasta rumor o leyenda urbana que va perdurando en el imaginario popular, y que relativamente sigue con opiniones divididas y con preguntas que probablemente jamas tendrán respuestas más que las que nosotros mismos nos demos, es así que la obra propone que el juez final seas vos votando a la salida del teatro «Culpable o Inocente» brindándote la respuesta de las funciones al comienzo de la siguiente semana.
La obra sigue en el Arlequín Teatro los Viernes y Sábados a las 21 hs y los Domingos a las 20 hs. con entradas a 100.000 Gs. con promoción de 2×1 con tarjetas Itaú.
