Después de su semana de estreno, la pieza de danza contemporánea de la emergente compañía ECOA extiende sus funciones en el Centro Paraguayo Japonés.
Traversata se presenta como la ópera prima de ECOA, inspirada en el capítulo Paraguay de la obra de teatro documental Ahata Aju de Fátima Fernández Centurión que versa sobre la migración.
“Somos una especie en viaje…” canta Jorge Drexler en Movimiento, una de las canciones que forman parte de la obra y que define en una frase poética la energía de esta obra.
Traversata explora la compleja experiencia de migrar, a través de una fusión de danza contemporánea, teatro y performance aérea. La partitura de movimiento retrata las emociones durante la travesía: el anhelo de nuevas oportunidades, la soledad y el asombro, así como los desafíos y riesgos de cruzar fronteras físicas o imaginarias.
La dirección general estuvo a cargo de Silvia Agüero, mientras que la dirección coreográfica fue llevada a cabo por Gloria M. Morel y Karina Abreu. El entrenamiento actoral para las intérpretes estuvo al cuidado de Fátima Fernández Centurión. También es importante destacar la participación de Nhi-Mu Teatro Aéreo en los momentos de trabajo aéreo.
Traversata reúne a las intérpretes creadoras Rocío Ortíz, Sara Recalde, Cecilia Plans, Cecilia Franco, Adriana Flores, Antonella Alvarenga, Florencia Boccia, Regina Pampliega y Ekaterina Goiburú, quienes realizan un buen trabajo de ensamble donde no hay protagonistas, aunque alguna que otra intérprete destaque en ciertos cuadros.
En términos de escenografía, destaca una impactante rampa que ocupa un tercio del escenario y que no sólo aporta atractivo visual, sino que además ofrece diferentes niveles y crea sensaciones de riesgo y emoción al deslizarse por ella. El lanzarse al vacío, el deslizarse ante las posibilidades.
La música, efectiva y armoniosa, da su sonoridad distintiva a la obra: aires folclóricos latinoamericanos van de la mano con la idea de que, como parte de este continente, la experiencia migrante es bastante particular. El diseño de luces colabora a diseccionar los espacios, crear atmósferas e intensificar momentos cargándolos de poder visual.
El vestuario está invadido por una paleta de colores de tonos terracota, amarillos, marrones y verdes que se desvanecen hacia el gris y que, al interactuar con las luces, adquieren un efecto cromático muy interesante.
Traversata, a través de la danza contemporánea, nos invita a reflexionar sobre la migración y el movimiento humano, pero sobre todo, sobre el valor de animarse.
La obra tiene dos últimas funciones este fin de semana a las 20:30 hs en el Centro Paraguayo Japonés.
